¿Césped amarillo? ¿Después de cortarlo? Te explicamos por qué

Cuando nos imaginamos nuestro jardín perfecto nunca vemos un césped amarillo. Sin embargo, es frecuente que su color verde se vaya perdiendo, especialmente al cortarlo, y es importante saber por qué ocurre y cómo solucionarlo.

Con el conocimiento adecuado y un poco de dedicación tendremos ese jardín perfecto que hemos imaginado con un color envidiable.

¿Por qué amarillea el césped?

El césped se vuelve amarillo debido a falta de agua, exceso de agua, compactación de las raíces, carencia de nutrientes, exceso de abono químico, abono orgánico inapropiado o enfermedades fúngicas. Si el césped amarillea solo al cortarlo es debido a que la vaina queda expuesta al cortar demasiado bajo.

7 motivos por los que amarillea el césped

Si te has preguntado alguna vez el motivo por el que el césped pierde su color verde y se vuelve amarillento debes saber que existen varios motivos:

Falta de agua

Cuando le falta agua, el césped se seca y adquiere un aspecto pajizo, amarillento y con una textura poco agradable para disfrutarlo.

Hay que tener en cuenta que en los meses más calurosos necesitará más agua que en las estaciones frías y que si el riego se hace en las horas de más calor, el agua se evapora muy rápido y el riego no será tan eficiente.

También hay que comprobar el sistema de riego pues nos podemos encontrar con alguna obstrucción en los aspersores o una rotura en alguna parte de la goma que impida el completo recorrido del agua.

Exceso de agua

Si la falta de agua puede amarillear el césped, el exceso también lo hace. Con un riego excesivo se pudren las raíces y los nutrientes no llegarán a toda la planta, notándose en su color y en su tersura.

Si es algo reciente, bastará con dejarlo sin regar un tiempo prudencial (que variará según la temperatura exterior y las condiciones climatéricas) pero si la situación ya lleva algún tiempo habrá que buscar otros cuidados.

Establecer una red de drenaje o airearlo pueden ser soluciones viables para este caso específico.

Compactación

Las raíces de las plantas están constantemente en crecimiento y algunas zonas mueren para dar paso a nuevas raíces. Con el tiempo se crea un enmarañado de raíces muertas que crean un tejido compacto impermeable.

Este tejido impide la correcta aireación de las raíces, el crecimiento de las nuevas y la absorción de nutrientes.

Para evitar llegar a este problema es recomendable realizar una escarificación dos veces al año (a final del verano y del invierno). Este proceso es muy sencillo y consiste en arañar superficialmente el terreno con una herramienta específica.

Carencia de nutrientes

Aunque las raíces se encuentren en óptimas condiciones (que no estén podridas ni demasiado compactadas), el césped puede tener carencias de nutrientes.

Si el terreno está agotado y sin nutrientes suficientes, el césped perderá su esplendor. Por ello suelen recomendar abonar dos veces al año y así mantener el suelo con la cantidad mineral necesaria para la salud del césped.

Un suelo fértil es rico en nitrógeno y con trazas de hierro. Además, debe contar con bastante humedad para que se vea con un color verde intenso.

Exceso de abono químico

Ya sea por mala distribución del abono o por una sobredosis, lo cierto es que un exceso de nitrógeno puede quemar el césped.

En caso de que suceda, lo ideal realizar es un riego abundante lo más rápido posible para evitar que se queme una extensión mayor.

Abono orgánico inapropiado

Tal como sucede con el abono químico, el abono orgánico también puede quemar el césped si no se reparte uniformemente o está mal descompuesto. En este último caso sería igual de desagradable el olor que dejaría en el jardín.

Enfermedades fúngicas

El césped es una planta y está sujeta a enfermedades como todos los seres vivos.

Si aparecen manchas amarillentas aisladas que van aumentando, podemos estar hablando de enfermedades fúngicas. Sin embargo, debido a la variedad de hongos que existen, es difícil de determinar la solución adecuada sin el asesoramiento de un especialista.

¿Por qué amarillea el césped después de cortarlo?

El césped es una hoja verde que crece de un tallo grueso y bajo, la vaina, de color bronce. Al cortar el césped, se está cortando esta hoja verde y si no tiene el tamaño adecuado se verá la vaina, motivo por el que parece que se queda amarillo solo después de cortarlo.

Cómo evitar que el césped se vea amarillo al cortar

Si bien el corte es un cuidado de mantenimiento del césped, debe ser realizado de forma adecuada.

La cortadora no debe cortar las vainas de la parte baja del césped, debiendo realizarse el corte con la altura adecuada para dejar una parte de la hoja verde visible. Por ello, no se debe cortar más que un tercio de la altura total.

La mejor manera de evitar tener un jardín con aspecto descuidado y amarillento es cortar el césped de forma habitual. Así no tendremos nunca el césped muy alto y no necesitaremos realizar un corte exagerado que deje las vainas visibles.

¿Hay especies de césped que se ponen más amarillas que otras?

Hay una gran variedad de céspedes disponibles y elegir el más adecuado es un paso importante a la hora de seleccionar la especie que utilizaremos en nuestro jardín.

En realidad no es que uno sea mejor que otro, sino que cuentan con distintas características y que debemos elegir el que más se adapte a nuestras necesidades, tanto por el uso que le daremos como por las características del suelo o las condiciones climáticas, entre otros factores.

El hecho que una especie se ponga más amarilla que otra tiene, muchas veces, una gran relación con los cuidados que se les debe prestar o el tipo de clima más adecuado.

Como cada especie de césped presenta sus propias características, podemos hacer varios tipos de clasificaciones y elegir teniendo los más importantes para nosotros. Las clasificaciones más comunes son según su uso, la climatología y necesidad de agua, el tipo de suelo, el precio y los cuidados de mantenimiento necesarios.

Las especies ornamentales son más estéticas y se mantienen verdes más fácilmente, sin embargo, su mantenimiento suele ser más dificultoso y no soportan el pisoteo frecuente, algo que se suele buscar cuando su uso es familiar.